Gabriela Medina D. No conozco mucho sobre Tailandia, pero me pareció una buena idea aprender más de este país a través del pad thai. Por suerte, tengo una amiga que pasó unas de sus vacaciones allá y durante ese tiempo tomó clases de cocina tailandesa y entre los platos que aprendió a preparar fue el pad thai.
El pad thai tiene un origen cargado de política, empezó con la obsesión de un dictador, que luego se convirtió en un proyecto de identidad nacional. “Como parte de una campaña nacional llamada Los fideos son tu almuerzo, el Departamento de Bienestar Público entregó a los tailandeses carritos de fideos gratuitos y distribuyó recetas para un nuevo plato nacional: el pad thai», explica el autor Alex Mayyasi, en su artículo The Oddly Autocratic Roots of Pad Thai.
De acuerdo con este artículo, el dictador tailandés Phibun creía que una cultura nacional fuerte, incluyendo el pad thai, era clave para que Tailandia siguiera siendo independiente. El país estaba rodeada de colonias que las potencias europeas habían justificado basándose en la civilización y la modernización de sus poblaciones. Además, Japón, que codiciaba el control de los recursos naturales, estaba creando un imperio en el este de Asia. «Debemos ser tan cultos como otras naciones», dijo Phibun a sus ministros en un discurso. De lo contrario, “Tailandia quedaría indefensa y pronto sería colonizada. Pero si fuéramos muy cultos, podríamos defender nuestra integridad, independencia y guardarnos todo para nosotros mismos”.
Así, este plato se convirtió en un símbolo representativo de Tailandia y aún lo sigue siendo.
Viaja a Tailandia desde casa
Así que para Comida Migrante, me dispuse a aprender a preparar pad thai con la receta que mi amiga aprendió en Tailandia. En principio, hay que destacar que no todos los ingredientes se pueden encontrar las cadenas de supermercado comunes de Santiago. Para este plato tuve que buscar en mercados asiáticos o supermercados con secciones de productos internacionales. En mi caso opté por un supermercado que queda entre las calles Lira y Marín, el cual posee varios alimentos y productos migrantes.
Para preparar pad thai se necesita pasta de arroz, cebollín, alguna proteína (nosotras escogimos pollo, pero mi amiga afirma que mejor queda con langostinos), salsa de ostras, salsa de soya, un huevo, champiñones (esto fue en sustitución por tofu porque se había agotado), tamarindo o salsa de pad thai, panela o chancaca, ciboulette, jengibre, dos dientes de ajo y brotes de soya. Todos estos ingredientes salieron alrededor de 15 mil pesos y queda para realizar varias veces y solo reponer los ingredientes más básicos.
Esta receta de pad thai la encontré muy sencilla y rápida de hacer. Si tienes un wok será aún más fácil si no en una olla o el sartén más profundo que tengas. Primero hacer un sofrito con el ajo y el cebollín después agregar la proteína escogida y revolver hasta que cocine bien. Acto seguido se añade el tofu o champiñones y los brotes de soya. Cuando la proteína ya esté cocinada se echa alrededor de una cucharada de salsa de soya y una de ostras, una de salsa de pad thai o tamarindo, una pizca de jengibre rallado, una cucharada de panela o chancaca rallada y dejar cocinar unos minutos mezclando.
Mientras se prepara la proteína se cocina los fideos aparte. La pasta de arroz se cocina bastante rápido, así que nosotras la preparamos calentando agua del hervidor y dejarla un rato cocinándose fuera de fuego. Cuando ya esté lista se coloca en el wok/sartén/olla y se mezcla con la proteína y las salsas. Enseguida le colocas el huevo y se une muy bien a los fideos, se deja unos minutos más y se sirve.
Ya servido el pad thai se añade el ciboulette que fue picado muy fino y pequeño previamente.
Impresiones del pad thai
- Esta primera vez no quedó perfecta y se nos secó un poco, así que hay que tener cuidado que no se seque. Para eso se puede añadir más salsas.
- Es un plato delicioso y muy fácil de hacer. Desde que lo aprendí a preparar ya forma parte del menú de mis almuerzos.
- El pad thai usualmente lleva maní también, pero lo omitimos por restricciones alimentarias.
