6 cervezas extranjeras que puedes encontrar en Santiago

Este Día Internacional de la Cerveza trae una nueva oportunidad de conocer otros países a través de esta bebida alcohólica. Santiago tiene una variada oferta de cervezas extranjeras y la mejor manera de probarlas es ir a la licorería o supermercado más cercano y experimentar.

Aquí Comida Migrante seleccionó 6 de la larga lista de cervezas importadas que puedes conseguir en Chile.

1. Cerveza Grolsch

La Grolsch Premium Pilsner es una cerveza holandesa fuerte y con cuerpo. Cumple con su descripción en el sitio web de ser una pilsner de malta crujiente con profundidad de sabor. Además posee 5° de alcohol.

La historia de esta cervecería es aún más sorprendente y llena de tradición. Grolsch abrió en la ciudad de Grolle en 1615, en medio de la guerra de Flandes. «Ochenta años de guerra pusieron las cosas muy difíciles para nuestro fundador, Willem Neerfeldt, y su familia, pero perseveraron», explica la misma cervecería.

Durante siglos, esta cervecería es una empresa familiar con los legados de los Neerfeldt, Kuijper, Haperink y De Groen que la misma marca considera han sido clave para el éxito de sus cervezas.

Otro dato curioso es la tapa de esta cerveza, cuando se impusieron las botellas con chapa, no dudó ni un momento en si debía de incorporarlas. «Yo soy el que decide dónde meto mi cerveza», expresó en su momento el dueño Theo de Groen. A pesar de los elevados costes de producción, el tapón a presión se quedó, lo que ha dado a Grolsch el aspecto icónico y único que tiene actualmente. 

2. Cerveza Quilmes

Siendo un país vecino no es inusual que la cerveza Quilmes se pueda encontrar. De olor y sabor dulce, color dorado oscuro y 4,9 grados esta lager es una buena opción para conocer Argentina.

Se describen como la cerveza de los argentinos por excelencia, perfectamente equilibrada, con buen nivel de espuma y sabor. «Para hacerla utilizamos sólo ingredientes naturales que crecen en los campos de Argentina», afirman.

La historia de esta cervecería comienza con un migrante alemán, Otto Bemberg, que en 1890 creó una cerveza con la aspiración de que estuviera a la altura de la tradición de su país.

Si aún no has probado esta popular cerveza, en su sitio web recomiendan acompañarla con pizza, milanesa o papas fritas.

3. Cerveza Michelob

Esta es una cerveza de arroz ligera con muy bajo grado alcohólico con 3,5 ° y aroma cítrico. Hecha en Estados Unidos, se describen en su sitio web como una lager ligera elaborada con el equilibrio perfecto de lúpulo Herkules y granos sanos. Se puede considerar ideal para tomar en el verano por su frescura.

Michelob pertenece a la cervecería Anheuser-Busch fundada en la década de 1850, la cual comenzó como una pequeña cervecería de barrio. El migrante alemán Adolphus Busch se casó con Lilly, hija del empresario local, Eberhard Anheuser, quien poseía una cervecería. A partir de esa unión, Busch empezó a trabajar en la compañía e inició el crecimiento de la marca. «Gracias a los esfuerzos combinados de Eberhard Anheuser, Adolphus Busch y miles de empleados, nuestra cervecería se transformó rápidamente de un elemento local a una presencia nacional», exponen en su sitio oficial.

4. Cerveza Cusqueña

Cerveza peruana y también muy popular en Chile. Es una lager fuerte con 4,8 grados de alcohol. Según Cusqueña, para elaborar su cerveza seleccionan e integran cuidadosamente cada uno de sus ingredientes: levadura, agua, lúpulo, cebada y un proceso especial para la malta.

Esta cervecería también tiene una larga tradición. «Cusco, la ciudad que vio nacer un imperio, fue el origen de nuestra cerveza premium peruana. Con la fundación de la Cervecera Alemana Günther & Tidow S.A por Ernesto Gunther, el cual lanza la cerveza Pilsener Bier Cusco. Luego la compañía se llamaría Cervecera del Sur del Perú S.A».

Para disfrutar de su cerveza lager en su sitio web recomiendan comer con un ceviche o una causa de langostino.

5. Cerveza Moritz

Cerveza catalana con sabor a caramelo, olor amargo y color ambar. De la lista es una con el grado de alcohol más alto con 7,2. Esta edición de la Moritz se llama Epidor y la misma casa cervecera la describe como su cerveza más radical. Intensa, aromática y braceada con malta caramelo con un cuerpo compacto y un color inconfundible que aporta una experiencia intensa y potente.

La primera fábrica de Moritz se inauguró en 1864 en la Ronda Sant Antoni por Louis Moritz, un migrante francés proveniente de Pfaffenhoffen, localidad de la región cervecera de Alsacia. La historia de esta marca ha sido un poco accidentada. En el año 78 se disolvió la empresa pero luego volvió con fuerza en el año 2004.

La versión Epidor recomiendan disfrutarla con pimientos rellenos de queso.

6. Cerveza Miller

Cerveza extranjera proveniente de Estados Unidos de color dorado claro, lager muy ligera de sabor como muchas otras cervezas de este país. «Manteniendo la visión original de Frederick, aún usamos el mismo proceso innovador y los más finos ingredientes para hacer una cerveza de la más alta calidad, cuatro veces filtrada para una suavidad excepcional. Estamos seguros de que él estaría más que satisfecho», afirma la marca.

La Miller Genuine Draft parece estar diseñada para compartir y disfrutar en fiestas y la vida nocturna.

Con una historia de hace un poco más de 160 años, Frederick Miller, con 30 años de edad, compró la Cervecería Plank Road en Milwaukee, Wisconsin. Según su sitio web, él y su esposa, recién llegados de Alemania, traían con ellos un saco lleno de una particular levadura de cerveza y el sueño del éxito en la industria cervecera de Estados Unidos. «El resto, como dicen, es historia. Muchas cosas han pasado en Miller Valley desde entonces, pero es ahí donde, en 1985, se elaboró la primera cerveza de barril Miller», explican.

Hay muchas cervezas extranjeras por disfrutar, más allá de estas seis. Si quieres conocer más de otras culturas, con un viaje a la licorería puedes estar un rato en Holanda pasar por Estados Unidos, Perú, Argentina y terminar en Cataluña.

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